Los aparatos de Apple Inc. han sido un dolor de cabeza para algunos fabricantes de cámaras digitales o dispositivos de GPS. ¿Serán los fabricantes de cajas registradoras los próximos?
Este año, más minoristas en Estados Unidos están armando a su personal con iPods Touch equipados con un escáner especial que puede usarse para recibir pagos con tarjetas de los clientes. La intención es evitar que se escapen ventas de consumidores que se cansan de hacer fila para pagar. También buscan un uso más productivo del espacio usualmente reservado para las cajas registradoras.
"No hay motivo para que un iPod Touch o un iPad no puedan reemplazar una caja real", afirma Calvin Hollinger, jefe de información y logística de Urban Outfitters Inc., una cadena estadounidense de almacenes de ropa que en mayo comenzó a enviar aparatos a cada uno de sus 378 locales.
Los dispositivos portátiles pueden escanear códigos de barras y leer tarjetas de crédito para realizar pagos. Los recibos pueden ser transmitidos por e-mail a los clientes o enviados a una impresora en la tienda. Los clientes que quieran pagar en efectivo tendrán que usar una caja registradora.
Una versión de pagos móviles a través de datáfonos inalámbricos es común en algunos países latinoamericanos, especialmente en restaurantes. El método surgió como medida de seguridad ante la clonación de tarjetas de crédito por parte de empleados inescrupulosos.
La nueva generación de pagos móviles en las tiendas aún está en sus primeras etapas y las cajas registradoras siguen siendo un gran negocio para empresas como NCR Corp., International Business Machines Corp. y Fujitsu Ltd. Las ventas de cajas registradoras y sistemas de puntos de ventas en EE.UU. totalizaron US$7.900 millones en 2010, según la firma de investigación de mercado IBISWorld, un descenso frente a US$8.800 millones en 2006.
Scott Kingsfield, quien gestiona el negocio minorista de NCR, afirma que las ventas de registradoras no se han desacelerado. De todos modos, a medida que los minoristas adoptan más tecnología móvil, NCR desarrollará más software y hardware para apoyarla, indicó Kingsfield.
A fines del año pasado, apenas 6% de los comerciantes de EE.UU. incluidos en una encuesta de la Federación Nacional de Minoristas de ese país afirmó que usaba aparatos móviles en los puntos de venta. Pero casi 50% de los encuestados señaló que planeaba adoptar ese tipo de aparatos en el próximo año y medio.
En julio, la cadena de tiendas por departamentos Nordstrom Inc. comenzó a desplegar 6.000 iPods Touch de Apple equipados con escáner en 117 tiendas.
Como primer paso, Urban Outfitters instaló dos sistemas móviles de pago en cada una de sus tiendas y afirma que está usando los iPods para completar 10% de sus transacciones. La cadena de tiendas habilitará más en 2012 y Hollinger proyecta que 80% de su personal de ventas podría usar los aparatos.
Un iPod Touch con un escáner cuesta alrededor de US$500, o 20% del precio de una caja registradora, dice Hollinger. La empresa mantendrá un puñado de registradoras, pero probablemente no comprará este tipo de máquinas cuando abra nuevas tiendas. En cambio, indica Hollinger, probablemente redistribuirá las registradoras en sus tiendas existentes a medida que son desplazadas por más aparatos móviles.
Los minoristas que quieran hacer lo mismo deben asumir el costo de comprar los aparatos y equipar sus tiendas con Internet inalámbrico. Los locales de ropa también deben afrontar otros problemas, como sensores y la incomodidad de doblar y embolsar las prendas sin un mostrador de venta.
De todas formas, algunos minoristas están apostando con todo a la tecnología. La cadena de cosméticos Sephora tiene una tienda en Nueva York equipada sólo con aparatos móviles. Sólo conservó una registradora, para casos de emergencia.